‘’Te lo voy a jurar por la mamá de la primera persona que inventó  el cigarillo de filtro, que se fumó Chita la mona de Tarzán’’

Apollo Sound

No saber bailar en Naguabo  era algo así como una herejía, es parecido a usted  comerse algunos panes de hostia con Royal Crown Cola, como hacían algunos panas míos que fungían de monaguillos en la Iglesia Católica del pueblo.

 Siendo un adolescente, Orlando ‘’Come Gente’’ me preguntó si yo sabía bailar y al contestarle que no, me expresa con su voz socarrona ‘’entonces tú no te enamoras, porque el que no sabe bailar  no puede conseguir jevas ni enamorarse’’  Aquello me trabajó, había que hacerle caso al hombre, después de todo él es considerado uno de los más renombrados filósofos de cafetín que hay en el pueblo, demasiada sabiduría popular en sus palabras. Para ser claro y honesto en mi juventud temprana nunca asistí a muchos bailes, pero fui testigo  de algunas cosas y ademas tenía unos panas que se amanecían en los bailes y contaban ¡una de barbaridades! 

Raymond ‘’Tres Coditos’’ se fue una noche de rumba..  Cuenta el hombre, que la entrada costaba $5.00, (eso debe ser en dinero actual como $40.00).  ‘’No hay manera Filomena’’ como diría Pedro Brull, que el hombre en cuestión pudiese pagar  semejante cantidad de dinero.  Así que hizo lo que todo joven de 16 o 17 años haría, trató de colarse. De alguna manera tuvo acceso a la parte posterior del salón que estaba techado de zinc y tenía par de planchas sueltas.  Logra entrar al salón de baile, con la mala pata de que las más de doscientos personas en el baile comienzan a gritar y a señalar  al intruso que se cuela por el techo.  Baja más rápido que ligero y trata de entremezclarse con los de adentro del baile, pero ¡sorpresa, el difunto Tommy Olivencia trompeta en mano le dice! ‘’mira chamaquito arranca pa’ las ventas del carajo de este baile si no quieres que te raje el casco de la cabeza con esta trompeta’’ Hasta el día de hoy no sé si Raymond dejó de comprar los discos de la Orquesta de Tommy Olivencia.

Mi primo Cheito Nieves Abadía era fanático de Choki ( ¡no el muñeco diabólico!), el bongosero de la orquesta de Eddie Palmieri.  Así que se fue al Mariana’s Night Club para a ver la orquesta de Palmieri.  Haciendo la  fila para entrar, estaba también el tío de nosotros Cheo Abadía, que al igual que en el caso de Raymond andaba con un fractura múltiple del bolsillo.  Entran los músicos y mi tío Cheo Abadía le dice a Palmieri ‘’ Oye Eddie, un breiquesito pa’ ver si puedo entrar, porque ando pelao.’’  Palmieri lo mira sonriendo y le dice ‘’brother, esta noche no hay break pa’ nadie en este baile’’  Mi tío muy serio mirando a  los músicos que se pierden entre la gente aglomerada en la puerta  grita a boca de jarro, ‘’ mira como le pagan a uno, después que enseño a este hijo de puta a tocar el piano, no me deja entrar’’.  Mi tío tiene razón… ‘’cría cuervos y te sacarán los ojos’’ jajajaja

Era la época de Huracán de Pasión año 1970, esperábamos ansiosos que llegara la orquesta,  estábamos frente al templete al lado de la Iglesia Católica.  Llegaron y Marvin lo primero que hizo fue preguntar  si había un sitio ‘’donde se puediera meter un azote antes de empezar el masacote’’   Los bailadores asintieron que sí  (había un punto de manteca, tecata, heroina o como le quieran llamar en Buenos Aires). El hombre era nuestro ídolo así que algunos incluso  le acompañaron a capear lo suyo en el lugar antes  mencionado.

Bueno, el caso fue que el Grifo de Nemesio Canales  se tardó bastante y Bobby Valentín algo molesto procedió a empezar el masacote sin él. De pronto llega acompañado de toda la muchachería que se fue con el gritando ‘’Bobby, Bobby, no empieces esta jodienda sin mi’’ de hecho, hubo que ayudarle a subir a la tarima porque lo que vendieron  parece que estaba bien bueno.   Como diría un pana que se metía por el ‘’bejuco’’  si Dios hizo algo mejor que ésto, se quedó con lo que fuera allá arriba’’

Ya la salsa había pasado de moda entre la juventud, y los bailadores se habían hecho viejos, estábamos en los 90.  Anunciaron una noche a la Selecta de Raphi Levit como atracción de las Fiestas Patronales.  Fiel cocolo  y con 40 y pico de años en las costillas me fui a la Concha Acústica, creo no habían más de 20 personas.  Recuerdo haber visto a Faelo de Río Blanco, a Jeannette, Papirín, Isaac Simmons, Monchito Cascajo y una novia de la juventud  entre otros.   La orquesta comienza y Hugo Dumont se para a mi lado. Uno de los cantantes de la orquesta dice por el micrófono asombrado ‘’ ven acá brother, ¿tú no eres Hugo?, diablos brother , yo te hacía muerto’’

 Bueno ya todos saben la historia, tocaba piano  con la Orquesta de Rubby Haddock, Yolanda Rivera de la Sonora en un baile le zumbó con un zapato y toda esas jodederas que de él se cuentan en el pueblo.

Ahora bien, el hombre,  antes de abrazar la locura como su aliada, me relató que en una actividad que coincidió con Héctor Lavoe en el Regency, Héctor le dijo que la próxima vez que estuviese en ese hotel, se tiraría de lo alto del mismo.  Recuerdo haber oído decir a Hugo ese mismo día ‘’que se haría el loco ‘’ porque la mujer lo traía por la calle de la amargura con las pensiones. Por cierto, eso fue en el negocio de Raúl de la Matta y lo acompañaba José Nogueras antes de que le pusieran ‘’el hígado americano’’ mmm el hombre bebía ron como si se fuese a acabar, es que uno ve a las celebridades y jura que no cojean de ninguna pata.

Todas estas y mas jodederas ocurren en los bailes, el viejo borracho que a las 4:00 am no se acaba de decidir entre el travesti bonito y la señora elegante de edad madura…   el hombre joven que baila toda la noche con la viejita y cuando prenden la luz y la ve embala a correr…   la señora que le dice a la de la taquilla ‘’dejame entrar que fue que a mi marido se le quedó la llave’’  y a los diez segundos se forma una garata de puta madre  y la voz de la señora que dice’’ así te quería coger con esta puta’’…  el tipo que dejan plantado a mitad del bolero y la guapa mujer que le dice ‘’ mira so fresco, guarda el condenao tubo que no hay pelea’’…  los cuatro tiros que suenan en el estacionamiento y tú que asomas la cabeza de presentao y las locas histéricas detrás de ti te dan un empujón y caes en medio del estacionamiento justo cuando el tipo sale más rápido que Culson revolver en mano frente a tí… y casi te cagas,  el que coge una borrachera de padre y señor mio y cuando sale al estacionamiento…una goma vacía y sin repuesta…. ya sabes, 10kms hasta Naguabo con la goma vacía y el aro botando candela…    te sientas tranquilito con tu doña en una mesa en el Real Palmas  con un whiskey con agua e’ coco ¿y quien aparece al baile y se sienta en la mesa del lado?  tu vecina con un cortejo que no le conocías y te vas del sitio porque sientes verguenza ajena…  el tipo que entra al baile y ve que hay 100 mujeres buenas hembras y ningun hombre y piensa ‘’el paraíso de la dulzura, esto sí que es sabrosura’’ sin  percartarse en el jodido letrero que dice ’’Noche Lésbica, sean todas  bienvenidas’’…  el hombre que se sienta en el rincón más oscuro del baile pero cuando el mozo prende el flash light para tomar su orden ve a su jefa dándose un grajeo de hostia santísima con uno de los compañeros de trabajo y lista para trasladarse a una cabañita de las de $20.00 sin televisor en Linda Vista.

Orlando, seguí tu consejo y aprendí a bailar..vi más jodiendas y pendejadas  que las novias que pude conseguir, hay toda una subcultura  de personajes en la vida noocturna.

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Luis Edgardo Rivera Abadia